El director técnico se encuentra acomodando las piezas debidos a la gran cantidad de bajas que posee
Colo-Colo se encuentra preparando el partido del día domingo, en donde se medirá contra Everton de Viña del Mar. Este será el primer encuentro que se perderá el central argentino, Matías Zaldivia, después de la expulsión sufrida frente a O’higgins de Rancagua y que lo dejará fuera de las canchas por las próximas cuatro fechas.
Entre los ausentes del cacique se encuentran los suspendidos, Matías Zaldivia (cuatro fechas) y Maximiliano Falcón (una fecha). A ellos se suman los lesionados Felipe Campos, Javier Parraguez y Óscar Opazo, quiénes aún se mantienen en rehabilitación.
Sin embargo, el plantel cuenta con dos altas. Por un lado, está Miiko Albornoz, quien ya se encuentra entrenando normal, tomando ritmo, por lo que podría sumar minutos ante los viñamarinos. A él se suma la recuperación del delantero argentino Nicolás Blandi.
El cacique mantendría el esquema del último partido, pero con un par de modificaciones; entre ellas, César Fuentes ratificado como central.
- En el arco, Bryan Cortés; el guardameta sigue firme cómo titular tras los buenos partidos que ha tenido y la jerarquía alcanzada.
- La defensa estará conformada por Jeyson Rojas como derecho, Daniel Gutiérrez y César Fuentes serán los defensores centrales. Mientras que por la banda izquierda; el capitán, Gabriel Suazo.
- El medio campo albo, quedaría conformado por el juvenil Bryan Soto, Leonardo Gil y Gabriel Costa.
- Mientras que en la delantera se mantendrían Marcos Bolados, Iván Morales y Martín Rodríguez.
Gustavo Quinteros saldría a afrontar el compromiso en el Estadio Sausalito con la esperanza de que dentro de la próxima semana, se sumen los últimos refuerzos.
El defensor central argentino, Emiliano Amor, llegaría proveniente de Vélez Sarfield y además, podrían existir novedades sobre un posible arribo de Favio Cabral, el joven delantero argentino perteneciente a Talleres es la carta de gol que desea Quinteros para cerrar el plantel.