Gabriel Lama, coach motivacional del Cacique, explicó la presión que siente el equipo en la recta final del torneo, algo similar a lo que vivieron en el 2020.
En medio de la recta final del Campeonato Nacional, Colo-Colo sigue enfocado en una sola cosa: salir campeón. Y es que los albos han realizado una correcta campaña este año, lo que lo tienen como líder absoluto del torneo a falta de siete fechas para el fin de la temporada, por lo que se ilusionan con bajar la tan ansiada estrella 33.
Al igual que el certamen anterior, el Cacique llega a lo último de la competición como candidato a quedarse con el trofeo. Eso sí, este año buscará revertir el final del campeonato pasado, donde se despidieron del título en las últimas fechas.
Pese a esto, ambas temporadas han sido completamente distintas a lo que vivió el Popular en el 2020, año en el que el Eterno Campeón estuvo a punto de descender por primera vez en su historia. Sin embargo, luego de este difícil momento el club volvió a donde debe estar y hoy está muy cerca de sumar un nuevo título a sus vitrinas.
No obstante, nada de esto fue al azar. Y es que uno de los grandes artífices para lograr esto tiene nombre y apellido: Gabriel Lama, ex judoca multimedallista a nivel panamericano y quien en medio del peor momento de la historia de Colo-Colo tomó el rol de coach motivacional en el camarín albo.
“Tenía que comprender para ser comprendido”
En conversación con Dalealbo, Lama explicó el trasfondo que tiene su labor en torno al trabajo mental realizado con los jugadores del Cacique. “El mayor potencial humano es el trabajo en equipo. Cuando trabajamos en equipo ganamos mucho más que de manera individual. Se tiene un propósito compartido y en este caso, un equipo de fútbol, todos quieren ganar. Eso se va a lograr si rige ese fundamento más de unirnos en vez de dividirnos”, comenzó diciendo.
“Fue un proceso muy bonito. Siento mucho vínculo y conecté muy bien con el plantel, donde se generó una linda amistad hasta cierto punto. Lo fundamental fue la humildad en el equipo. El judo tiene esa esencia de la humildad y lo principal para entrar llegar así, compartiendo las dificultades por las que pasé”, agregó.
Sobre cómo fue trabajar con el camarín del Popular en medio de la lucha por no descender, el coach detalló que “tenía que comprender para ser comprendido. La esencia del coach de vida es preguntar. El coach es un ‘preguntólogo’. Quería escucharlos y entender lo que estaban pasado, y ahí se abrieron las puertas. Cuando todos nos sentimos escuchados, el 100% está comprometido, aunque no todos estén de acuerdo con la medida. Ahí está la clave y lo que se puede replicar en otros equipos”.
“Desde marzo que vengo trabajando individualmente con algunos jugadores. Trabajé con el equipo desde diciembre del 2020, cuando estábamos en la situación menos deseada del equipo, hasta julio del 2021. Me llamaron en marzo y me pidieron desde el cuerpo técnico para ir trabajando con algunos jugadores”, reveló el ex judoca.
El descenso vs campeonar
Hoy el presente del equipo albo en completamente distinto y se enfoca de lleno en abrochar el título. Sin embargo, para Lama la presión que esto significa no es diferente a la que tuvieron que soportar en el 2020, pues hay muchos puntos de coincidencia en ambos frentes. “Se cruzan desde la mirada, de la misma manera. En un momento está la interferencia del miedo a no descender y ahora el miedo a no ser campeón o el exceso de deseos de ser campeón”, explicó.
“Se suman todas estas situaciones. Mientras más me conecte con las interferencias más nos va a afectar. Ser campeones es una consecuencia de lo que puedo hacer en la cancha, en los entrenamientos del día a día. Para eso es este trabajo de preparación mental. Todo este universo de personas que está apoyando para que el deportista llegue en su mejor versión”, concluyó el coach motivacional.