El atacante trasandino tenía contrato hasta el año 2025, pero en una jugada fuera de lo previsto decidió marcharse al fútbol brasileño.
Un pésimo arranque del año 2023 tuvo el Popular, luego de conocer la salida de su máximo goleador en la campaña pasada. Con la cantidad de 24 goles en todas las competencias disputadas, Juan Martín Lucero se encuentra en la agenda noticiosa del fútbol chileno por aceptar una oferta millonaria desde Brasil, cuando ya había renovado su vínculo con los albos.
Esta decisión viene ligada a una posible demanda hacia Fortaleza (equipo que adquirirá el pase del argentino) y para el ex delantero de Vélez Sarsfield. Sin embargo, pareciera que el único que sí apoya este movimiento es el ex guardameta de Colo-Colo, Paulo Garcés.
En diálogo con BolaVip, el actual portero de Club Deportes Valdivia instauró en el debate la acción de juzgar siempre a los jugadores. El Halcón puso en ejemplo algunos dirigentes que también buscan romper contratos e, inclusive, lo hacen bajo amenazas con tal de cumplir su cometido.
“Uno no alimenta a su familia con amor”
“¿Por qué siempre juzgamos a los jugadores cuando toman este tipo de decisiones? ¿Y por qué no juzgamos a la gente que está a cargo de los clubes? A veces, hay dirigentes que buscan romper contratos, hasta con amenazas, para no cumplirlos. Acá el que está siempre juzgado es el jugador. Uno tiene pretensiones económicas y familiares. Entiendo los hinchas pero veámoslo de la vereda de al frente“, señaló.
También, quiso dejar en claro que en la carrera de un jugador de fútbol no se vive con el amor de la hinchada. “Uno no juega por amor. Uno no alimenta a su familia con amor. Deberíamos juzgar a los que están a cargo, que te hacen renunciar a los contratos, que te obligan a hacer cosas indebidas. Hay momentos en los que hay que tomar una decisión y él lo hizo“.
Por último, comparó este acontecimiento con lo vivido por el Martín Rodríguez en su último ciclo con el Eterno Campeón.
“Martín Rodríguez la rompió en Colo-Colo, él tenía una cláusula y se fue. Quedó juzgado Martín, pero no el club. Al que lo atacaban era a él. Lucero la rompió en el club y ahí equivale y pesa la decisión de cada uno. A mí me pasó, me obligaron a rescindir mi contrato por tres años y no se ve el trasfondo que está pasando“, finalizó.