Rodrigo Riquelme no pudo brillar con la camiseta del Eterno Campeón, sin embargo, destacó su paso por los pastos del Estadio Monumental como el momento de gloria en su carrera profesional.
Corrían los primeros días del año 2009 y Colo Colo anunciaba un sorpresivo refuerzo. Proveniente desde Curicó Unido, que en ese entonces militaba en la Primera B del fútbol chileno, Rodrigo Riquelme daba el gran salto en su carrera profesional y firmaba por el club más popular del balompié nacional.
No obstante, su paso por los pastos del Estadio Monumental dejaron mucho que desear y luego de sólo 10 partidos con la casaquilla alba emigró a Palestino en busca de una nueva oportunidad en el fútbol. Luego de retirarse en San Luis de Quillota (2019), el jugador se radicó en la ciudad de Talca y desde la comodidad de su hogar concedió una entretenida entrevista a AS Chile.
“Colo Colo fue el peak de mi carrera en cuanto a los equipos en que jugué, por los desafíos. Me acuerdo que llegué y se dijeron cosas como… ‘mándenlo a préstamo, que no se quede, no va a jugar’. Yo llegué y, dentro de todo, jugué más que algunos que llegaron como figuras. Fue un paso importante, por la institución, por la experiencia. Ahí, al final un partido vale por 10, por todo lo que se genera alrededor”
A pesar del poco protagonismo que el paraguayo tuvo en su estadía por Pedrero, no se arrepiente y confiesa que su gran salto desde un club de la división de plata al equipo más grande de Chile es algo casi inédito.
“Lo que pasa es que, a veces la gente me dice ‘te apuraste en ir a Colo Colo’. En ese año, llegar de Segunda División, de un equipo como Curicó, directamente a Colo Colo, era casi imposible. Hoy, por el tema de que hay muchos representantes y promueven a los jugadores con videos y otras cosas, todo cambió mucho. Me siento un poco pionero en ese sentido y esas son las cosas que te dejan”, cerró Rodrigo Riquelme.