El ex portero de Colo Colo indicó que todos los jugadores cometen fallos que cuestan caro. “Son cosas que pueden pasar, hasta a los mejores“, sostuvo.
Paulo Garcés ya está mejor luego de una grave lesión que sufrió hace más de una semana jugando por Deportes Valdivia en la Segunda División, teniendo que ser operado de una fractura en el antebrazo izquierdo, transformándose en una baja para el club por al menos unos cuatro tres meses.
El arquero en medio de su recuperación se dio el tiempo para abordar todo lo que ha sido su carrera futbolística y utilizó una analogía que incluye al arquero del Real Madrid, Thibaut Courtois, para referirse a los errores como portero que ha cometido, como el pasó en algunas ocasiones cuando vistió la camiseta de Colo Colo.
“Cuando pasó lo de Católica, recién estaba empezando. Es un periodo de adaptación. En Colo Colo pasó lo mismo, pero con mayor madurez. Se come un gol Courtois, y no se lo va a comer Garcés. Son cosas que pueden pasar, hasta a los mejores arqueros del mundo”, explicó en diálogo con AS Chile.
El futuro de Paulo Garcés en el fútbol
Respecto a la intervención quirúrgica a la que se sometió, el guardametas de 38 años entregó detalles. “Tengo en mi antebrazo dos placas, con seis pernos cada una. Puede ser que en dos a tres meses vuelva”, agregó.
Además, Garcés fue claro en señalar que esto no le quita la ganas de estar en el campo de juego, motivo por el que el retiro no es una posibilidad que por ahora pase por su cabeza. “Por ahora no. Quiero seguir hasta que el cuerpo diga basta. Por ahora, tengo contrato con Deportes Valdivia hasta 2024 y planeo cumplirlo. Ellos se han portado muy bien conmigo“, aclaró.
“Tengo energía y la mente siempre positiva. Me gustaría que el fútbol chileno me recuerde como un arquero que se cayó y se levantó una vez más. De tener los cojones para enfrentar grandes adversidades”, concluyó.
En su etapa en Colo Colo, Paulo Garcés estuvo por cuatro temporadas (2014-2016) y logró ganar dos trofeos, uno de la Primera División 2015 y el de la Copa Chile 2016.