Raúl Olivares se está desempeñando en Universitario de Vinto en Bolivia, donde el torneo fue suspendido por arreglo de partidos.
Un verdadero terremoto afectó al balompié boliviano, pues Fernando Costa, presidente de la Federación Boliviana de Fútbol, anunció la suspensión del Torneo de Primera División y la Copa de la División Profesional, tras comprobarse con pruebas irrefutables el arreglo de ciertos partidos.
Esta situación fue determinada como consecuencia de la liberación de un audio entre Marcos Rodríguez, presidente del club Vaca Díez y Gaad Flores, árbitro del fútbol boliviano. Esta conversación estipulaba que el juez del encuentro debía garantizar que se hicieran cinco goles en el partido, con el fin de amañar el compromiso y verse favorecido en las apuestas.
La situación actual es de crisis total, sobre todo para los futbolistas ya que actualmente la gran mayoría de los mercados están cerrados, por lo que se hace prácticamente imposible cambiar de aires hasta final de año. En consecuencia de esta situación, Las Últimas Noticias conversó con Raúl Olivares, quien actualmente jugaba por Universitario de Vinto.
“Estoy un poco molesto porque por unos pocos, pagamos todos los platos rotos, toda la gente que se esfuerza y se sacrifica. Salieron pruebas en contra del presidente de un club, pero también se habla de jugadores y esas pruebas aún no salen a la luz. Hay que tener cautela con eso porque con sólo nombrarlos pueden provocarle un daño irreversible”.
El ex guardameta de Colo-Colo se sinceró y relató el drama que está viviendo con su club, que actualmente estaban realizando una gran campaña. “Uno siente impotencia y tristeza porque muchos de mis compañeros y yo nos sacrificamos para salir de un lugar bastante incomodo y ponernos en las puertas de la Copa Sudamericana. Uno siente que todo el trabajo que hizo no vale la pena o se fue a la basura, pero al mismo tiempo sabemos que el trabajo y el sacrificio diario están ahí, no lo va a borrar nadie”.
Junto con ello, el canterano del Cacique hizo memoria y contó que a él sí le tocó vivir una situación poco convencional. Este hecho data del pasado 20 de agosto, cuando su club de enfrentó al Always Ready por la fecha 24 del torneo boliviano, en un encuentro que se resolvió a último minuto con un gol del guardameta chileno.
“Me pareció algo extraño el partido que jugamos contra Always Ready, donde el árbitro cobró un penal que no me pareció. Pero se lo atribuyo más a una falla humana que a una mala intención. Los árbitros se equivocan, de repente pasa. Al final del partido nos cobraron un penal a favor y metí el gol del empate 1-1 en el último minuto”.
Tras la anulación de los dos torneos del fútbol boliviano, el Consejo Superior determinó que se realizaría un torneo express que durará hasta final de año. No obstante, la situación aún no está del todo clara, ya que algunos clubes han planteado no participar. Uno de ellos fue The Strongest, líder de la competición antes de la suspensión. De momento, todo es incertidumbre en el calvario que está viviendo Raúl Olivares y los demás jugadores del fútbol boliviano.
Durante su paso por Colo-Colo, el guardameta de 35 años se formó en el Estadio Monumental y subió al primer equipo en la temporada 2006 y permaneció en el club hasta 2014, aunque vivió muchos periodos de préstamo. Con la camiseta del Eterno Campeón disputó 17 compromisos entre tres temporadas, aunque fue en 2010 donde más jugó.
