Gran impacto causó el reciente fichaje de Luciano Cabral a Everton de Viña del Mar en desmedro de Colo-Colo, principalmente por el tiempo que estuvo vinculado el volante en conversaciones con Blanco y Negro, además de por lo silenciosa que terminó siendo la negociación.
Desde que llegó el Grupo Pachuca a dirigir los destinos del cuadro ‘Oro y Cielo’ han mantenido un perfil efectivo en sus gestiones, pues han realizado una fuerte inversión económica en los últimos años y no es primera vez que anticipan al Cacique en un refuerzo.
A principio de temporada, el ex presidente de Blanco y Negro, Alfredo Stöhwing había confirmado el arribo de Braian Martínez, jugador argentino proveniente de Independiente de Avellaneda. Sin embargo, en un giro inesperado, terminó fichando por el conjunto viñamarino, contradiciendo públicamente a la concesionaria.
El futbolista indicó como factores de su decisión la rapidez en la gestión del Grupo Pachuca, lo que lo hizo sentir más considerado por Everton que por el Popular. En tanto, la dirigencia del ‘Rojo’ se dejó tentar por el factor económico, ya que ofrecieron una opción de compra considerablemente superior (2.5 millones de dólares).
El ‘trampolín’ del Grupo Pachuca
Otro punto atractivo a considerar por los jugadores es el ‘trampolín’ que podría significar el negocio con la empresa mexicana. Esto se debe a que la empresa mexicana es propietaria de varios clubes, tales como Club León, el propio Pachuca, recientes campeones de la Concachampions, o Real Oviedo de la Segunda División de España.
Al tener la propiedad de varios clubes, el Grupo Pachuca realiza transferencias y préstamos entre sus clubes de manera frecuente.
De hecho, se informó que el ‘Chaco’ Martínez tenía todo listo para partir a la Liga MX tras un semestre en el cuadro ruletero, pero su grave lesión en la última fecha del Campeonato Nacional podría frenar aquella operación.