Efemérides: Caszely y un agónico empate sobre la hora en Quito

Carlos Caszely y Leonardo Véliz lideraron al cacique, que consiguió un valioso empate en Ecuador, en la histórica…

Carlos Caszely y Leonardo Véliz lideraron al cacique, que consiguió un valioso empate en Ecuador, en la histórica campaña de Libertadores 1973.

Un 11 de marzo de 1973, Colo-Colo se midió frente a El Nacional de Ecuador, en un encuentro válido por la segunda fecha de la fase de grupos de la Copa Libertadores. En aquel encuentro, el “Popular” igualó 1-1 con un gol de Carlos Caszely al 85′ de partido.

El encuentro se tornó muy complicado en la recta final, ya que, el delantero ecuatoriano, Ítalo Estupiñan, abrió la cuenta para el elenco quiteño al minuto 76, poniendo así el partido cuesta arriba para el popular.

Sin embargo, un notable pase a tres dedos de Francisco “Chamaco” Valdés dejó solo a Leonardo “El Pollo” Véliz, quien en el área encaró por la izquierda al defensor ecuatoriano, y antes de que el portero llegara a trabar el balón, cedió la pelota a un siempre peligroso Carlos Caszely. El “Chino”, a boca de jarro, paró el balón y con un zurdazo terminó igualando el encuentro a cinco minutos del final.

(Gol de Caszely en minuto 1:51)

Un equipo histórico

Colo-Colo en dicha fase de grupos terminó siendo puntero con ocho puntos, seguido por Emelec con siete. El Nacional de Ecuador y Unión Española quedaron eliminados, con cinco y cuatro puntos, respectivamente. Caszely, terminó siendo el goleador de aquella competencia con nueve tantos.

Aquel histórico elenco albo que fue dirigido por Luis Álamos, formó en Quito con Adolfo Nef en portería; Mario Galindo, Leonel Herrera, Rafael González y Manuel Rubilar en defensa; Guillermo Paez, Francisco Valdés y Leonardo Véliz en el mediocampo; y con Elson Beiruth, Carlos Caszely y Sergio Ahumada en delantera.

El periodista Luis Urrutia, autor del libro “Colo Colo, 1973”, comentó a El Mostrador: “A mí me tocó ver que cuando se construía el Metro en la Alameda y en las zanjas los obreros colocaban un televisor portátil para ver los partidos. Al estadio llegaban ochenta mil personas”.

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